En defensa de la democracia: rechazo a la ley de censura y persecución de las OSC y
rechazo al sesgo de la denominada Comisión Garrote que busca someter a los medios de
comunicación.
Las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) de Paraguay expresamos nuestro más
enérgico rechazo al proyecto de ley que cuenta con media sanción de la Cámara de
Senadores y que está en estudio en la Cámara de Diputados, la cual bajo el disfraz de
«control y transparencia», ataca el funcionamiento libre y autónomo de nuestras
organizaciones. Esta ley, al igual que la Comisión Bicameral de Investigación creada en el
Congreso, representa un peligro inminente para la democracia y la libertad de expresión en
nuestro país. A todo esto, se suma que las sesiones de la Comisión se deben realizar de
manera pública, así como lo estipula la ley.
El proyecto de ley «QUE ESTABLECE EL CONTROL, LA TRANSPARENCIA Y LA RENDICIÓN
DE CUENTAS DE LAS ORGANIZACIONES SIN FINES DE LUCRO», actualmente en discusión,
distorsiona la realidad. Las OSC ya estamos sujetas a estrictos controles financieros y de
transparencia, como se detalla en los informes financieros anuales y el cumplimiento con
la SEPRELAD. El nuevo marco legal busca limitar aún más nuestra capacidad para operar
libremente, especialmente en áreas críticas como la lucha contra la corrupción y la
rendición de cuentas.
La ley centraliza el control en el Congreso, lo que permitirá que recursos internacionales
destinados a proyectos sociales puedan ser manipulados o retenidos por intereses
políticos. Esto no solo afectará el trabajo de las OSC, sino también a la sociedad paraguaya,
que es la principal beneficiaria de nuestros esfuerzos en áreas como la salud, educación,
derechos humanos y desarrollo.
La Comisión Bicameral de Investigación representa una herramienta de persecución hacia
los medios de comunicación y las OSC. Bajo el amparo del artículo 195 de la Constitución
y su reglamentación por la Ley N.o 137/93, se pretende justificar investigaciones que
vulneran la autonomía y libertad de las OSC y los medios. La creación de esta comisión no
es más que un intento de amedrentar a quienes alzan la voz para denunciar la corrupción y
los abusos del poder. Es inaceptable que se utilicen mecanismos legales para silenciar y
censurar el trabajo esencial de quienes promueven la transparencia y la justicia en
Paraguay.
La evidencia muestra que varios miembros del congreso nombraron en forma directa a
grupos de medios y organizaciones de la sociedad civil. Uno de los argumentos planteados
es que desde las OSC se financian movimientos o partidos políticos, algo que fue
desmentido esta semana ante la propia comisión, donde Christian Ruiz Diaz, director de
Financiamiento Político del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) dijo que la
comisión hizo preguntas sobre las ONG a lo que la respuesta fue que no existe ninguna
prueba de que OSC hayan aportado a campañas electorales según las pesquisas
realizadas.
Llamamos a la ciudadanía, a los medios de comunicación y a todos los actores políticos
comprometidos con la democracia a que se unan a la defensa de las OSC y de la libertad
de prensa. No podemos permitir que la censura y el control socaven los derechos
fundamentales que tanto hemos trabajado por proteger. Las OSC son un pilar esencial de
nuestra sociedad y su capacidad para operar de manera independiente debe ser
resguardada. La democracia en Paraguay está en riesgo, y ahora más que nunca, es crucial
defender nuestras libertades y derechos.